Comienzan los playoffs, la época más emocionante del año en la NFL pero también el indicador de que la temporada va llegando a su fin. Son solo once encuentros los que nos quedan por delante para conocer el ganador de la Superbowl 52 y tan solo doce los elegidos para luchar por el tan ansiado anillo. En contra de lo que estoy leyendo en la mayoría de webs y sitios especializados en esta nuestra competición, creo que tenemos ante nosotros una postemporada de enorme calidad, en la cual espero grandísimos partidos como reflejo de una Regular Season que para mí ha sido una de las mejores que recuerdo de los últimos años. Esta semana llego un poco justo pero he pensado en escribir previo a cada jornada pequeñas notas con las que considero que serán las claves de cada uno de los enfrentamientos. Let’s go!!!

TENNESSEE TITANS @ KANSAS CITY CHIEFS

Por alguna extraña razón los Titans han abandonado el Smasmouth Football y han relegado a un segundo plano su juego de carrera. Si quieren tener alguna opción de ganar en su primera visita a la postemporada desde 2008 tienen que hacer de su ofensiva terrestre la protagonista del encuentro. Puede parecer una salvajada lo que voy a decir pero creo que la baja de DeMarco Murray les puede venir bien ya que Derrick Henry ha sido sin duda su mejor corredor este año y debe ser el caballo de batalla este sábado.

De la misma forma los Chiefs también tienen que hacer de Kareem Hunt su principal amenaza aun cuando este no consiga grandes jugadas durante la primera mitad del partido. Ha quedado más que demostrado que cuando Andy Reid confía en su running back los Chiefs ganan. Blanco y en botella.

La defensa de Titans debe evitar a toda costa los big plays de los que tanto ha vivido la ofensiva de Chiefs esta temporada. Ya sea a través del propio Hunt o del velocista Tyreek Hill los locales han hecho de este tipo de jugadas una de sus principales bazas para subir puntos al marcador. Del RB debe estar pendiente un front seven que ha dejado claro estar más que preparado para limitar daños por tierra. Para detener al receptor, Adoree Jackson debe demostrarnos que Tennessee no se equivocó cuando pagó  por él una primera ronda del último draft.

Arrowhead, vía Kansas City Chiefs

La línea ofensiva de Titans no ha funcionado tan bien como se esperaba y aunque Kansas City no destaca precisamente en tener una gran defensa a la hora de presionar a los quarterback rivales, deben tratar de intimidar a Mariota en su primera presencia en unos playoffs. No es imprescindible que consigan el sack pero sí que el quarterback se note agobiado. Si lo consiguen, empezarán a llegar las entregas de balón de un Mariota que se ha mostrado muy impreciso.

Arrowhead. Nunca he escondido mi amor por este estadio y por su afición. Es preciosa la atmósfera que se crea en este campo de fútbol americano, sobre todo en los días grandes como el de este sábado. Estoy seguro que el público será factor en el primer partido de la ronda de Wild Card especialmente si se llega al final con un resultado apretado.

ATLANTA FALCONS @ LOS ANGELES RAMS

Julio Jones es una estrella de la liga y el mejor jugador del ataque de los Falcons. La secundaria de los Rams es la unidad más débil de la defensiva. Por lo tanto, con casi total seguridad el receptor podrá hacer buenos números, pero la clave cuando Atlanta esté atacando será su producción vía terrestre. Aunque parezca mentira los locales han sido el segundo equipo que más yardas ha permitido por intento de carrera de toda la liga (4,7), por lo que Steve Sarkisian, coordinador ofensivo de Falcons, debe aprovecharse de ello y hacer que la dupla Freeman-Coleman sea la que deslumbró en 2016.

Vìa PFF

Gurley y el temido play action. El running back del conjunto angelino debe ser el MVP de la liga, ya no solo por los números que ha conseguido, los cuales son de otro planeta, sino por la importancia que supone para el ataque de los suyos. Las defensas le temen y eso hace que las jugadas de engaño, como play actions o fake hand-off donde Jared Goff amaga con entregarle el balón, hayan sido realmente productivas para los Rams, además de una preciosidad de ver ya que las ejecutan a la perfección. Por si esto fuera poco la defensa de Falcons es una de las peores defendiendo este tipo de situaciones.

Goff nos ha callado la boca esta temporada a todos y cada uno de los seguidores del fútbol americano. Después de un primer año como profesional totalmente penoso nadie pensaba que podíamos ver esta versión del que fuera número uno del draft de 2016. McVay lo ha conseguido y ha hecho del ídolo californiano un quarterback apto para la NFL. No obstante, esto es enero y la presión con la que se juega no es la misma que en un encuentro de Regular Season. Su línea ofensiva ha sido una de las unidades más efectivas que hemos podido ver, lideradas por un Withworth que acaba de ser nombrado left tackle All Pro. Él y sus compañero de OL deben darle a Goff la misma tranquilidad que le han ofrecido durante todo el año ya que si por el contrario los frontales de Falcons liderados por Beasley y Jarrett consiguen intimidar al quarterback, Atlanta tendrá mucho ganado.

El factor Aaron Donald. El mejor defensa de la competición amenaza con destrozar el pocket de Falcons y hacer que Matt Ryan pase una de las peores noches de su carrera deportiva. Andy Levitre, el left guard titular de Atlanta se ha lesionado y será un rookie sin experiencia alguna el que tendrá que substituirle. Sarkisian debe ayudarle a través del uso de tight ends e incluso de los mismos corredores, colocando sobre Donald dobles e incluso triples bloqueos. Aun así, todo hace indicar que la carnicería está servida.

Por Stéfano Prieto

@Stefano_USA

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