EL NACIMIENTO DE SACKSONVILLE.
Nadie, a comienzos de agosto, podría imaginar hasta donde iban a llegar los Jaguars en la temporada 2017. Ni los más optimistas soñaban en aquel momento con una final de conferencia, pero Tom Savage, que allá por septiembre empezó “dirigiendo” el ataque de los Houston Texans, no supo ni por donde le venía la marabunta que lo capturó hasta en 10 ocasiones y empezó a dar forma a los Sacksonville Jaguars. Jacoby Brissett lo fue hasta en 11 ocasiones y aún está dolorido.
Myles Jack, Calais Campbell, A.J. Bouyé, Jalen Ramsey, Paul Posluszny, Yannick Ngakoue… son sólo algunos nombres que destacaron, entre otros muchos que también hicieron una gran temporada durante la Regular Season y los Playoffs, con excepcionales actuaciones como la referida ante Texans, el partido ante Ravens en Londres, o las dos victorias ante Steelers, ambas en Pittsburgh en las que consiguieron interceptar a Big Ben hasta en 7 ocasiones entre los dos partidos.
EL ATAQUE SE SUMA A LA FIESTA.
A ese excepcional despliegue defensivo de los “Sacksonville Jaguars” sólo les faltaba que el ataque se uniese a la fiesta y no tardó mucho en hacerlo. Quizá no al nivel de la defensa, pero dando un nivel más alto del que se esperaba a priori.
Con un record de 3-3 y basando su ataque en el despliegue de su corredor novato, Leonard Fournette, “Blake Neo Bortles” empezó a atiborrarse de las pastillas azules que repartía Morpheus en la primera parte de Matrix y colocó a equipo y aficionados en una realidad virtual que ni los más acérrimos aficionados del equipo habrían imaginado a principio de temporada.
En esa “realidad virtual”, los Jaguars, de la mano de un inspirado Bortles (11 TD, sólo 3 INT y más del 65% de pases completados) consiguieron 7 victorias en 8 partidos y cimentaron su victoria en la AFC South, aprovechándose de la irregular campaña de todos sus rivales divisionales que, entre lesiones y mal juego, no fueron capaces de cumplir las expectativas y darles mas batalla.
LA TEMPORADA DE JAGUARS NO FUE UN SUEÑO…
Ni siquiera las dos derrotas finales, ante los 49ers y los Titans (que se estaban jugando el pase a post temporada) o las 5 INT que sufrió Bortles en esos dos partidos (en los que se olvidó de tomar las pastillas de realidad virtual y volvió a ser el Blake Bortles que todos conocemos) bajaron de la nube al equipo y lo demostraron con dos buenas y convincentes victorias en playoffs, ante Bills y Steelers, donde se vió, sobre todo ante los de Pittsburgh, que los Jaguars iban a ser un rival muy real.
Quizá el partido ante Steelers, en la final divisional, pueda dar una impresión equivocada al encajar 42 puntos, pero, ciertamente realizaron un magnífico partido y pusieron al equipo en disposición de ganar los partidos y los Sacksonville Jaguars se plantaron en la Final de Conferencia de la AFC donde les esperaban los New England Patriots.
…PERO FOXBOROUGH ES LA VIDA REAL.
Pareció por un momento, que Bortles, al fallar sus dos primeros pases, podría tener “uno de esos días”, pero, apoyado por un incomensurable Fournette y una Ofensive Line que le regalaba tiempo para pensar y leer la defensa rival, como si fuese el mismísimo Neo en Matrix, puso a su equipo en franquicia en el marcador 14-3, con un 15 de 17 para 184 yds. al descanso. Mientras, en el otro lado del balón, la defensa no dejaba respirar ni un segundo a Brady y los ataques de Patriots, tras un field goal inicial, terminaban en punt.
Todo se desarrollaba a la perfección para los Jaguars, hasta que un drive lleno de penalizaciones para la defensa (alguna que otra más que discutible) llevo a los de New England hasta la End Zone y les permitió recortar distancias hasta el 14-10 con el que terminó la primera parte.
Un tercer cuarto y principio del último bastante trabado, con dos field goal de Jaguars y un touchdown de Patriots pusieron el 20-17 en el marcador con 06:21 en el reloj.
Con el balón en manos de Brady, la defensa cansada y sufriendo lesiones, eso es demasiado tiempo por delante para poder aguantar en Foxboro. El touchdown de Patriots se veía venir y acabó llegando en una excepcional jugada en la que Brady conectó con Amendola, que haciendo un escorzo tremendo consiguió pisar con ambos pies en la end zone antes de salirse del campo.
Aún quedaban mas de dos minutos de tiempo para un último intento de los Jaguars de remontar el partido y seguir soñando, pero la defensa de New England no dio opción a Bortles y el 20-24 fue definitivo.
Los Patriots vuelven a la Super Bowl un año después y los Jaguars se despiden con la sensación de haber desperdiciado una oportunidad histórica.
Al final, Bortles si que se había tomado la pastilla roja y volvió a la cruda realidad… aunque cabe preguntarse que cuota de culpa tienen Marrone, y Coughlin, en el encogimiento repentino del equipo durante la segunda parte.
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