Te tumbas en el sofá y conectas con tu partido de college football favorito pero, ya sea por las horas o por la posición, te duermes. Entonces, cuando te despieras te das cuenta que hace horas que acabó ese encuentro que tanto querías ver. Incluso atisbas a leer a tu gurú en Twitter que fue la leche… porque si, la pasada Week 9 tuvo partidos de esos de que si pestañeabas te perdías algo. Así que vayamos al lío.
#6 Texas Longhorns at Oklahoma State Cowboys
Se enfrentaban los Longhorns, rankeados en el número #6, contra la estatal de Oklahoma en un duelo que pintaba duro para los tejanos. Y así fue, pues hubo tremenda emoción hasta el final del partido, sin haberse decidido nada hasta los últimos instantes, siempre muy cercanos ambos en el marcador y decantándose finalmente por el que más lo mereció. Si os gustan los finales apretados y con emoción, ya estáis tardando.
#9 Florida Gators vs #7 Georgia Bulldogs
La SEC es probablemente una de las mejores conferencias de toda la Division I del college football. No solo porque tiene algunos de los mejores programas de toda la nación (Alabama, LSU, Georgia, Florida…) -hasta 6 están en el AP Top 25 Poll de cara a la Week 10-, sino porque, además, disputan entre si muchos de los grandes partidos, no solo semana tras semana, sino también de la temporada. Y en la Week 9 no fue menos: Los Gators venían a refrendar su gran temporada, ese resurgir de las cenizas tan fulgurante que les debería llevar de la nada al mucho (¿Playoffs? Quien sabe); y los Bulldogs, traspies inclusive, eran esa roca dura de roer, que estaba ahí año tras año pero que nunca terminaba de llegar al final, por lo que este temporada se están esforzando porque si, aunque, como siempre, tienen duros rivales.
Una vez visto, como os pasará si también disfrutastéis de duelos como el que dirimieron Florida y LSU, os daréis cuenta que aquí nadie da dos duros a pesetas, como dirían nuestros padres. Porque “quien quiere algo, algo le cuesta”. Y vaya si que cuesta, porque aquí el que un día está en estado de gracia, al otro está de bajona total, que diría aquel. En resumen, una bomba de relojería que nunca sabes para donde va a explotar.
#14 Washington State Cougars at #24 Stanford Cardinals
Se sincero: ¿A que esta temporada aun no has visto ningún partido de los Cougars y puede que si, incluso varios, de los Cardinals? Pues ahora es la ocasión idonea para que disfrutes de una de las universidades tapadas de moda (más allá de los de sobra ya conocidos UCF) contra uno de los mejores ataques, y más explosivos, de toda la competición (ese que componen, entre otros, JJ Arcega-Whiteside y Bryce Love). Porque, sobre todo, sabemos que quieres ser aquel que reinvidique lo que pocos reivindicarán. Y ese no es otro que Gardner Minshew, el genial QB de Washington State, uno de los reyes del primer pase.
#18 Iowa Hawkeyes at #17 Penn State Nittany Lions
Con nuestras recomendaciones no vais a aprender mucho, tampoco somos quienes de enseñar, pero una norma no escrita es que siempre que haya dos Top 25 frente a frente, hay que poner un ojo. Y más si están los amados Hawkeyes de nuestro amigo Diego. Ganarán, perderán, pero respiran College y siempre darán espectáculo. Ya sea ofensivo o defensivo. El rival que tenían enfrente eran nada más y nada menos que Penn State, que esta temporada ha sufrido el síndrome de la montaña rusa. Los dos llegaban con dudas y pocas certezas a un partido que fue de los más entretenidos de la semana. ¡¡Preparaos para los turnovers!!
#22 NC State Wolfpack at Syracuse Orange
Los Wolfpack llegaron a este partido en una nube, con un global de 5-1 y el seed #22 del ranking. Se encontraron enfrente a Syracuse, que también está cuajando una gran temporada y el partido no pudo estar más reñido, decantándose de parte de uno de ellos en el último minuto. Si quieres saber cual de los dos equipos fue el que lo consiguió finalmente y cual quedó algo tocado, no esperes más para verlo.
¿A que mola el fútbol americano universitario? Con nuestra listas semanales seguro que os estáis quitando ese prejuicio de que es aburrido, desigual y sin talento alguno. Porque todo lo contario, es la cantera de una de las mejores ligas del mundo (NFL). Y como tal no podía ser una cosa de tres al cuarto. A nuestras pruebas nos remitimos y nos remitiremos.
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