Creo que un importante porcentaje de personas está dando este partido por cerrado, dado que los visitantes tienen una importante baja: Derek Carr. El QB de los Raiders ha sido uno de los puntales de la temporada, aportando toda su calidad para un juego aéreo muy respetable y un excelente supporting cast.
Y claro, en 2016 tenemos el antecedente de un partido previo que se jugó en el estadio Azteca, el 21 de noviembre, donde los Raiders se quedaron con el triunfo en un enfrentamiento bastante entretenido.
Ahora, ¿tiene sentido analizar este duelo previo pensando que Carr no va a estar? Probablemente no, desde la perspectiva de la ofensiva aérea de los Raiders, pero si podemos estudiar lo que sucedió con el juego de carrera, y todo el esquema ofensivo de los Texans.
Estado Actual
Los Texans vienen también de cambios profundos en una fecha algo inadecuada, aunque los resultados dirán todo. No por el volumen de los mismos, si no por decisiones que marcan mucho por lo trascendental. En particular, el envío a la banca del hombre de los 72 millones, Brock Osweiler. Bill O’Brien tuvo el coraje de desafiar al Front Office, aprovechando el espantoso partido que hacía Osweiler en casa frente a los Jaguars, e instalar a su “posible” (siempre diré posible, porque no tengo una cámara en el despacho de O’Brien) plan A, Tom Savage, quién remontó el duelo y los dejó con vida en la pelea por los playoffs. Por otro lado, este jueves aparecieron rumores de la posible salida de Bill O’Brien luego de los playoffs. Algunos pueden decir que estas situaciones extradeportivas no influyen en el rendimiento. Pero seamos honestos, ¿como enfrenta un equipo de trabajo el hecho que tu jefe se puede ir? Se puede tomar de buena o mala forma, y eso lo veremos hoy sábado. ¡¡Ya hay equipos preguntando por O’Brien!!
El punto complejo, es que Savage está en protocolo de conmoción y está etiquetado como OUT en el Injury Report del viernes. Esto cambia todo.
Las Claves:
Osweiler tiene que jugar de forma inteligente
En cuanto al juego de pase, Brock Osweiler ha demostrado no ser confiable en rutas medias y largas. Solo un juego corto le ha rendido frutos. La distribución de jugadas es marcada a favor del juego corto, son 5 veces más pases en corto que en largo para los Texans. Algo que no es novedad alguna en la liga (y es algo que les molesta a varios, ¿no?), pero si tomamos en cuenta las yardas por pase completo. Osweiler está último, si consideramos a los QB con más de 300 pases intentados. El el único entre 30 QB en tener menos de 6 yardas por pase completo.
¿Y como anda la secundaria de los Raiders? En esta temporada no han sido muy puestos a prueba en jugadas de pase. Son el 5to equipo al que menos le pasan, pero son el peor en yardas por pase completo. Y la peor performance ha sido en pases largos. Son casi 15 yardas por completo en pases de media y larga distancia. Esto habla a las claras que el plan podría contemplar jugadas largas con el veloz De Andre Hopkins e incluso con Will Fuller, mientras afirma el juego corto con Fiedorowicz y Griffin, los TE. ¿Estará Osweiler preparado para el desafío? Creo que el game plan podría incluir jugadas de medio-largo calibre, pero creo que O’Brien no confía en él. Por algo lo sacó.
Houston necesita a un Lamar Miller inspirado
En el partido de México, Houston logró instalar un juego terrestre interesante en los números totales, consiguiendo que Lamar Miller obtuviera más de 100 yardas. Entre Miller y Osweiler consiguieron 123 yardas en 26 intentos, con un promedio de 4,7 yardas por intento. Las 7 carreras restantes (hechas por otros 3 corredores) tuvieron un total de 1 yarda. Si, UNA yarda. Un dato que ensucia el promedio final de yardas por intento, que quedó en 3,8 YPI. El juego terrestre fue utilizado en el 42% de las jugadas y sólo permitió obtener 6 de los 22 primeros downs en todo el partido.
En el Texans – Titans se produce la misma distribución de jugadas, 42% de carrera y 58% de pase. Pero promediaron 2,1 yardas por intento y apenas 6 primeros intentos por esa vía. Grimes tuvo 2,0 yardas por intento (8), y Alfred Blue 2,5 yardas por intento (11). Lamar Miller no jugó. En el duelo previo, frente a Bengals. Miller tampoco estuvo. El más destacado fue Blue, con 73 yardas en 21 intentos, un nuevamente mediocre promedio de 3,5 yardas por intento.
Miller pudo participar de la práctica del viernes sin inconvenientes. Y Miller puede ser un factor fundamental para dar el triunfo a los locales. Ya mencioné anteriormente la baja cantidad de Primeros Downs que consiguen por carrera. Es curioso ver que en los 3ros y 1 o 2 yardas, los Texans hayan seleccionado 19 jugadas de carrera y 18 de pase, con porcentaje de conversión global que bordea el 55%. En el global, convierten apenas el 37,3% de sus 3rd Downs, lugar 22 de la NFL. Miller tiene que estar más activo en ese tipo de jugadas.
La receta para el juego de carrera debiera ser el uso de los espacios que se generen directamente en el centro y entre el C y el Right Guard. Son el tercer equipo de la liga que corre más por el centro y están Top 10 de ganancia de yardas entre C y RG, con un número decente de 4,3 yardas por jugada.
La defensa contra la carrera de los Raiders tuvo un traspié no menor contra los Broncos, evento que puede ayudar mucho al plan de juego de los Houston. Denver mandó 40 jugadas de carrera, con 143 yardas y 1 TD, contra apenas 27 jugadas de pase. En la temporada, los Raiders fueron atacados fundamentalmente por el centro, pero donde más sufrieron daño, fue por fuera de los tackles y…. por el lado derecho. Las 6,8 yardas por intento de carrera es el peor promedio en la liga. Sería ilógico que los Texans no explotaran ese espacio. Por fuera de los tackles, los Texans han cumplido con lo justo, pero no sería extraño verlos usar esa estrategia. Aunque en el partido contra Oakland, apenas lo hicieron 2 veces para 9 yardas.
¿Y qué hacen los Raiders? ¿Correrán más que de costumbre?
Los visitantes van con su 3er QB, Connor Cook. El novato de Michigan State será el primero en milenios (?) en tener su debut absoluto en un partido de Postemporada. Utilizar a un QB sin experiencia en estas lides, nos podría hacer pensar en un cambio de gameplan, buscando jugadas más seguras, para minimizar errores, aumentar tiempo de posesión y corriendo más con la pelota.
Si tomamos un dato simple, como es la proporción de jugadas carrera/pase, en la derrota contra Denver (donde Cook ingresó desde la banca), hubo 16 jugadas de carrera contra 32 de pase. Una proporción similar a la que se dio contra Houston en Ciudad de México. Contra Indianapolis, corrieron 37 veces frente a 34 pases, con una actuación estelar de DeAndre Washington, quién bordeó la centena de yardas y convirtió 2 TD. Pero los Colts no son tan buen parámetro para evaluar la defensa contra la carrera (penúltimos en YPI).
Si tomamos los datos globales, los Raiders han sido muy irregulares corriendo. Consiguieron 1922 yardas de carrera en la temporada, con un respetable promedio de 4,4 YPI. Pero contra equipo de buenas defensas, anduvieron mal. Contra Baltimore y Carolina, equipos top 6 contra la carrera, bordearon las 60 yardas de carrera.
La lógica nos dice que los Raiders debieran intentar correr más hacia la izquierda de su ataque, ya que están top 10 en promedio por carrera entre los gaps C-LG y LG-LT (sobre 5 YPI). Por fuera del LT corren bien, pero intentan poco. Su fuerte ha sido correr por el centro, son el equipo de la NFL que más corre por allí.
El problema para ellos, es que los Texans están top 10 de la liga defendiendo esos 3 sectores indicados. En el caso de los espacios entre LG y LT, los rivales ni siquiera llegan a las 3 yardas de promedio por carrera. Podrán ver un ejemplo en las capturas de abajo (ya aprenderé a capturar videos, XDDDDDDDDDD)
Si tomamos los datos del partido de México, en los 15 intentos que hicieron por esa zona positiva para ellos, apenas lograron 20 yardas. Cushing, Mercilus, McKenney y Clowney fueron los principales tackleadores en esas jugadas. ¡El mejor intento fue de apenas 4 yardas!
Ya veremos si el juego de carrera va por ese lado o no. El problema es que el LT Penn está descartado por lesión. Kirkland debiera ser su reemplazo. Es una ausencia clave.
Sobre el juego aéreo, no es un misterio que los targets serán Crabtree y Cooper. Houston está en el top 10 la defensa contra el pase. No han tenido partido alguno con más de 300 yardas de pase en contra. Y el peor desempeño fue justamente contra los Raiders, con 295. Pero 110 yardas fueron con dos sendos pases de Carr en pleno último cuarto. Pero no está Carr.
Contra Denver, Cook combinó bien los pases cortos, tanto hacia el centro como para los costados. Usó bastante el shotgun, lo que ya constituye un cambio, ya que con Carr y su lesión al dedo se dejó de usar el under the center. Se movió bien en el pocket, pero cuando se vio demasiado presionado, perdió el balón con demasiada facilidad, como fue en el fumble del 3er cuarto. En el TD de Cooper armó lo que debiera ser el modelo a usar el día de hoy. Usando a los corredores como válvula de escape, pases medios y cortos al centro y pases más largos a Cooper. Aunque ya perdían 24 a 0. Houston debe tratar de mantener a Cooper fuera del partido, ya que puede aparecer con una jugada larga que puede marcar un cambio en el duelo.
La zona roja
Houston no es el peor equipo en zona roja, sólo porque están los Jets antes que ellos. Y están entre los 4 peores equipos de la liga dentro de la yarda 10. Pueden tener ayuda de los Raiders, que están dentro de los equipos que más yardas permiten en defensa, y dentro de los 10 peores defendiendo en zona roja. ¿Caldo de cultivo para una mejora del rendimiento en zona roja? Y créanme que los Texans han terminado relativamente bien la temporada en este departamento.
Las estrellas defensivas.
Khalil Mack se ha convertido en uno de los mejores pass rushers de la liga, incluso siendo candidato al Jugador Defensivo del año. Es curioso pensar que pudo haber sido seleccionado justamente por los Texans en 2014, pero finalmente se decantaron por Jadeveon Clowney. Clowney ha tenido 2 años muy complicados, con lesiones y críticas del medio. Pero este año, y sobre todo luego de la salida por lesión de JJ Watt, ha tenido una explosión de calidad.
Pocos QB de la liga pueden jugar bien contra la presión y en este partido no jugarán. Cook y su línea ya sucumbieron a la presión en el partido contra los Broncos. Es un momento para que estos dos jugadores se vean dominantes y presionen a los pasadores rivales.
En resumen, un duelo lleno de misterios. Quién sabe si Connor Cook recuerda sus grandes momentos en el College y lanza uno de esos partidos que lo lanza al estrellato. O nos encontramos con un enorme juego defensivo y pocos puntos. Varios han dicho que los partidos del sábado están algo aburridos, pero eso no lo compro. Son los playoffs y puede pasar cualquier cosa.
En la crónica post partido veré si estuve acertado con mis comentarios, o me dedico a editar la página y programar tuits (?)
@chonet
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