El año pasado fue muy decepcionante para los Jets despues de estar a poco de clasificar a playoffs. El record de 5-11 ni termina de contar lo malo que fue el año. Lo peor de todo es que esta temporada será, probablemente, peor todavía.

La directiva de los Jets decidió irse por un plantel más joven y practicamente limpió la casa de veteranos. Eric Decker, Brandon Marshall, Nick Mangold, David Harris, Darrelle Revis, Ryan Fitzpatrick, entre otros fueron cortados o su contrato no fue renovado. Me atrevo a decir que, junto a John Fox, nadie corre más riesgo de quedar sin trabajo que Todd Bowles.

¿Que esperar este año?

Los Jets van a ser horrendos este año y probablemente peleen por el primer pick del próximo draft. Fin.

El año pasado vimos un penoso espectáculo de Ryan Fitzpatrick, después de llegar como el Mesías luego de un buen 2015, donde termino en la banca y volviendo a jugar nuevamente. No hay duda que sus intercepciones le costaron más de un partido a los Jets. Este año, como dice nuestra querida Presidente, cada día podría ser peor.

Josh Mc Cown, QB de los NY Jets – Foto: Getty Images

Los Jets llegan con un grupo de QBs que entre los tres no hacen uno. Para ser justos, me agrada Josh McCown. Le podría haber ido mejor en su carrera si hubiera tenido mas consistencia y menos lesiones. Para los que lo quieren patear en el suelo, ¿cómo explican entonces que siga jugando a su edad? El problema, como decía, es que justamente se lesiona mucho y además tiene tendencia a cometer errores en las lecturas a las defensivas. Lo siguen Hackenberg y Petty. El primero, parece que va en camino a ser un fiasco de 2 ronda en su segundo año solamente (¿aló, Cyrus Jones?). Le han dado oportunidades en las prácticas y ahora en pretemporada, decepcionando de gran manera. Bryce Petty tuvo sus momentos el año pasado, al menos mostró cojones al jugar en condiciones muy desfavorables. Igual no tiene, por ahora, condiciones para ser el mariscal titular de algún equipo. Si McCown se pierde varios partidos, como el 2016, estos Jets podrían ser incluso peores de lo que todos piensan.

 

Matt Forte llegó como un agente libre cotizado a un equipo que venia de terminar 10-6. Además de terminar todo mal, se notaron los años en el corredor veterano y se vio, en general, muy disminuido a lo que acostumbrábamos a ver de él. Powell, el corredor de 3ra oportunidad el 2016, parece que tomará más protagonismo e incluso podría llevarse el peso de los acarreos. Me entusiasman sus opciones este año y creo que puede ser uno de los puntos altos del equipo.

En los receptores, tras quedarse sin Marshall y Decker, quedaba un grupo con poca y nada de experiencia como titular en la liga. El único que inició partidos para el equipo el 2016 (Quincy Enunwa) se perderá toda la temporada. Le van a pedir mucho a jugadores no probados en la liga. Cómo esta la posición de ala cerrada? Bien, gracias. Veremos si Seferian-Jenkins finalmente logra mantenerse fuera de problemas. La línea ofensiva tiene algunas cosas. Este año le dieron un nuevo contrato a Brian Winters y pueden formar una gran dupla de guardias con James Carpenter. Este último tuvo un muy buen 2016 en un muy mal equipo. Kelvin Beachum llegó después de un pésimo año en los Jaguars. Es difícil volver de una rotura de ligamentos, por lo que podría rebotar este año. De cualquier forma, no tiene una buena temporada desde el 2014 y no ha participado mucho del training camp. Si vuelve a su nivel 2014, esta línea podría sorprender a varios.

Leonard Williams, Defensive End de los NY Jets – Foto: Getty Images

A la defensiva, su único punto alto viene en la línea. Leonard Williams, ya en su 3 año, ha probado ser un animal y siempre va a requerir atención adicional de los equipos contrarios. Es uno de mis candidatos a dar el salto y entrar en el top 3 en su posición este año. Sí, donde juegan Donald, Suh, Williams, Atkins, entre otros. Muhammad Wilkerson decepcionó mucho después de firmar un gran contrato que pidió a los 4 vientos. Eso suele pasar y espero que recupere su nivel este año. Y digo espero porque, si no remonta, podrían seguir limpiando la casa con él. Uno que seguramente será la diferencia, para bien o mal, es Sheldon Richardson. Los Jets llevan un buen rato tratando de deshacerse de él y simplemente no han podido por su contrato. Una de las razones, aparte de su bajo nivel de juego reciente, es su naturaleza conflictiva. El año pasado entró en discusiones por la prensa contra Brandon Marshall y este año ha seguido cargándole la mano, aun cuando ya no sigue en el equipo. Si logra mantenerse fuera de problemas y concentrado, esta línea no se entregará fácilmente ante cualquiera. Los Linebackers entran con muchas dudas, por ser generoso. La gran prueba la tendra Darron Lee. El jugador de 2 año tuvo un frío año de novato después de ser reclutado en primera ronda y llegar con mucho ruido de los Buckeyes. Si repite su temporada anterior, el nombre de bust no se lo va a sacar nadie.

Jamal Adams, el novato de primera ronda 2017 de los NY Jets – Foto: Getty Images

En la secundaria, Morris Claiborne llegó como agente libre desde Dallas. Este es otro jugador talentoso que su carrera no ha despegado por lesiones. El año pasado mostró algunas buenas cosas y nuevamente lo frenó una lesión. Cuando está sano, puede ser un buen CB2, pero creo que tendría más problemas contra el mejor receptor contrario. Buster Skrine también puede ser sólido en algunas circunstancias. La gran apuesta de esta unidad vino en el draft al tomar a dos profundos que se perfilan como titulares. Jamal Adams era para casi todos un jugador top 3 de esta generación. Aun siendo novato, tiene cualidades indudables de liderazgo que puede aportar en un equipo más joven. Su atleticismo y olfato para grandes jugadas lo podría poner en una buena situación para ganar el novato defensivo del año.

¿Que podría salir mal este año?

Las expectativas son tan bajas, que dificilmente puede salir peor. Aun así, se ven varios problemas en el horizonte. Tal como dije anteriormente, una lesión a Josh McCown los pondrá en un peor lugar del que están. También dependen de varios receptores que, repentinamente, serán lanzados a los leones.

El conflictivo Richardson puede terminar siendo, otro año más, una distracción y problema en el camarín. En un equipo con tan poco que jugar, una mala semilla puede bajar la moral de los que juegan por amor propio. Y si Wilkerson tiene otro año bajo? Le tirarán todo el muerto a Williams?

Calendario complicado, terminan con bandera blanca las últimas semanas.

No van a tener mucho tiempo para aprender en el camino, ya que parten con dos visitas difíciles a los Bills y Raiders. Aun cuando vengan bajos, Buffalo es un rival divisional.

En las 8 semanas siguientes, tendrán 4 partidos divisionales, una visita a Tampa y reciben a los Falcons. Partidos contra los Browns y Jaguars se ven más accesibles.

Luego de un tardío bye en la semana 11, reciben a Carolina, a los Chiefs, seguidos por visitas a Denver, New Orleans y New England en las últimas 4 semanas. No me sorprendería que no ganen ninguno de esos partidos.

Veremos como funciona la reconstrucción de los Jets. Podrían quedarse con el premio mayor con una selección alta y una clase de mariscales que promete el 2018. Su rango seguramente se moverá entre los 1-3 partidos ganados. Si ganan 5, lo consideraría una sorpresa total. Bonito desafío para Bowles. Este año puede demostrar de lo que está hecho. El año pasado Hue Jackson mantuvo a sus jugadores compitiendo hasta el final, aun cuando nadie esperaba que ganaran un partido.

Por Christopher Holmes

@cholmess

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