Que felicidad tan grande la de este jueves por la noche. Siete largos meses tuvimos que esperar para poder disfrutar nuevamente de nuestra competición favorita, pero por suerte regresó, y regresó a lo grande, con un tremendo partido jugado de tú a tú ente dos equipos que tienen muchas papeletas para volverse a ver las caras en enero. New England Patriots y Kansas City Chiefs nos regalaron un kickoff inmejorable en el que las alternancias en el marcador fueron una constante hasta los minutos finales.
Los de Massachusetts se las prometían muy felices antes de empezar un encuentro que estuvo precedido por la ceremonia de presentación del quinto Vince Lombardi que aterriza en las vitrinas de Robert Kraft. Un inicio de fiesta en donde el aclamado Mark Wahlberg ejerció de maestro de ceremonia antes de dar paso al que se suponía que sería un paseo en el tan ansiado camino hacia el 16-0. Ja!!, nadie se acordó que enfrente tenían a un señor equipo, que había llegado sin invitación a Foxboro pero que terminaría saliendo por la puerta grande entre vítores y aplausos de los Pats haters, sí, esos que no han tardado en salir de la cueva en la que llevaban escondidos desde el pasado mes de febrero.
No obstante hay que decir que el principio del partido nos hizo pensar a más de uno que efectivamente los Patriots se pasearían por el campo durante toda la noche. Un primer drive perfecto, seguramente ensayado hasta la saciedad, aplicando el no huddle que solo ellos tan bien saben ejecutar, les puso a las primeras de cambio por delante en el marcador. A renglón seguido, y en la primera jugada ofensiva de los Chiefs, el novato Kareem Hunt se presentó al mundo con un fumble que recuperaría New England a las puertas de la redzone de Kansas City. “Nos quedamos sin partido”, eso fue lo que más escuché en el abarrotado pub en el que los colegas de NFL Chile nos reunimos para kickoff. Nada más lejos de la realidad. Los Chiefs dejaron en blanco el drive de su rival deteniéndoles en un cuarto y pulgadas que sirvió para que nos diéramos cuenta que los Pats tendrían que sudar la gota gorda si querían llevarse el gato al agua.
En la siguiente serie Kansas City se atravesó el campo con esa facilidad pasmosa con la que solo ellos saben hacerlo cuando ponen el modo diésel a su ataque, con un Hunt que se había olvidado de la desgraciada jugada con la que se bautizó como profesional y que estaba empezando a dar detalles de lo que nos regalaría a lo largo del encuentro. Cualquier otro se hubiera hundido, no habría sido capaz de sacarse de la cabeza tal desgraciada jugada, pero no Hunt, él mismo sabía que había sido un accidente puntual, una novatada sin importancia de la que se repondría fácilmente como así demostró. Los Chiefs anotaron su primer touchdown del año en este drive gracias a un pase del desahuciado Alex Smith a Demetrius Harris confirmando así que habían venido a dar mucha guerra. Durante el resto de la primera parte un touchdown más para cada lado además de un field goal para los locales, llegando de esta manera al descanso con un 14-17 que auguraba una gran segunda mitad.
Tras la vuelta de los vestuarios la defensa de los Chiefs empezó a carburar gracias a un trabajo inmenso de la línea defensiva, la cual empezaba a agobiar cada vez más a un Tom Brady que jugó bien pero que estuvo más errático de lo que acostumbra. Para ser justos, este crecimiento de la defensa de Kansas City estuvo acompañado por una bajada de un par de escalones en el nivel de la OL de Patriots, para mí sin duda la mejor unidad del equipo durante todo el encuentro. Este crecimiento de la defensa fue liderado por el gran Justin Houston, quien completó un partido para enmarcar, siendo pieza clave tanto en la presión a Brady (consiguió dos sacks y varias presiones más) como en la contención de carreras exteriores. Mención aparte también para un Berry que secó por completo a Gronkowski, pero que se lesionó de gravedad dejando así un sabor agridulce a la victoria (este viernes se ha confirmado que Berry será baja para el resto del año con una rotura en el tendón de aquiles).
Este buen hacer de la defensa de Chiefs estuvo acompañado por un ataque que pocas veces antes habíamos visto ser tan agresivo. Alex Smith se destapó con varios pases largos, terminando alguno de ellos en touchdown, y el genial Andy Reid pasó de especular con el marcador y fue a hacer sangre en cuenta vio que su rival estaba tambaleándose. 28 puntos anotaron entre los dos últimos periodos, algo completamente inusual para lo que suele ser el conjunto de Missouri. Smith completó una de las mejores actuaciones de su ya larga trayectoria, Tyreek Hill nos enseñó porque han confiado en él como WR1 y el nombrado Hunt reventó cualquier registro para un rookie yéndose hasta las 246 yardas totales acompañadas de 3 touchdowns.
A esta exhibición ofensiva ayudó y mucho una paupérrima defensa de Patriots que nos mostró sus costuras a las primeras de cambio. Todos sabíamos que carecen de pass rush y que Belichick y Patricia van a tener que inventarse algo a lo largo del año, pero es que su secundaria tampoco dio la cara. Ningún cornerback y safety tuvo su noche y dejaron entrever alguna que otra carencia que hasta este jueves parecían no tener, véase Gilmore. Si a cada minuto que pasaba sufrimiento de la defensa se veía acentuado, este se disparó en el momento que Hightower tuvo que abandonar el emparrillado por lesión, ahí terminaron de romperse.
Al final un marcador de 42-27 que me parece demasiado abultado para el nivel mostrado por los dos equipos y que da pie a las tan conocidas sobrerreacciones de la primera semana. Las conclusiones que saco yo de este gran partido son, por un lado, que los Chiefs continúan siendo un bloque muy sólido y que parecen estar preparados para dar ese pasito que les falta, y por el otro, que los Patriots, más allá de que siguen siendo los grandes favoritos de la AFC, no son ese equipo invencible que se vendía antes de empezar y que tienen un serio problema en el front seven. En cualquier caso, gran actuación de ambos para ser la semana uno de competición. Aquí un servidor se fue completamente satisfecho a la cama y emocionado por lo que se nos viene por delante. El show ha comenzado.
Por Stéfano Prieto
@Stefano_USA
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