Después de revisar todas las divisiones de la NFC, cambiaremos de conferencia. Partiremos por una donde hay 3 equipos que quieren destronar al que ha sido campeón los últimos 7 años y 13 veces en los últimos 15: la AFC Este. A todos estos equipos les tocará jugar contra la AFC Norte y la NFC Oeste.

Buffalo Bills

            Una temporada baja difícil para un equipo que tenía una de las peores situaciones con el tope salarial. Como si fuera poco, los Pegula, dueños del equipo, le dieron un ultimátum a Rex Ryan después de solo un año en Buffalo: playoffs o se queda sin trabajo. Depende de tu opinión de Ryan es si eso es una buena o mala noticia.

En lo personal, encuentro que es un payaso que por momentos recuerda que es una de las mejores mentes defensivas en la liga. Sus equipos, en general, juegan con poca disciplina y pierden el control cuando los partidos no salen como ellos quieren. Sin embargo, por momentos el año pasado la defensiva de los Bills llevó a recordar por qué Rex fue contratado en primer lugar. Hubo partidos realmente notables, como contra los Colts o de visita en New England, y algunos desastrosos como contra los Jaguars o los Giants. De hecho, previo al partido contra el último equipo mencionado empezó a hablar de la simpatía que le tenía a los Giants por haberle ganado dos veces en el Super Bowl a los Patriots. A los pocos días fue superado en todas las facetas. En vez de estar preparándose como una persona seria jugó su rol de payaso, el cual los periodistas aman para sus notas, y los resultados quedaron a la vista.

Y no es solo el tema de la seriedad, los Bills pasaron a ser el equipo con más capturas a uno de los peores en esa categoría el año pasado manteniendo casi el mismo personal. Tuvo problemas con uno de sus mejores jugadores defensivos (Mario Williams) y que terminó con su salida para esta temporada. A ningún GM o dueño le gusta ver un cambio tan drástico para peor, especialmente en el área que es la especialidad del nuevo entrenador.

Para seguir con el circo, Rex trajo a su hermano Rob a los Bills como asistente del Entrenador en Jefe. Veremos cómo se comportan juntos y en esta posición de jerarquía organizacional, pero Rob tampoco se distingue por ser una persona reservada. Sin contar lo anterior, no se puede ignorar que viene de manejar una de las peores defensivas históricas en New Orleans el último par de años. Se puede argumentar que la defensiva no estaba armada en su especialidad y que se opuso a la contratación de Jairus Byrd, pero eso no explica el horrendo nivel. Cuando estuvo en Dallas también tuvo muchos problemas y en ambas ocasiones se fue con polémica.

Hace poco murió Buddy, el papá de ambos, una de las mentes más prodigiosas en el lado defensivo, inventor de la defensiva 46 que culminó con el título de los Bears en el 85. Nunca pudo replicar tal éxito como entrenador, por razones similares a sus hijos. Sus equipos no tenían la fortaleza mental o la disciplina que necesitan en instancias decisivas en playoffs. Histórico fue su altercado, como coordinador defensivo en los Oilers el año 93 donde trató de pegarle un combo al coordinador ofensivo del equipo en la mitad de un partido. Puede ser que los hermanos se enfoquen en dedicarle la temporada a su padre de forma positiva.

Como lado positivo, el equipo tiene mucho talento en varias posiciones. Se le tiene que dar crédito a Whaley por lo anterior, aunque fácilmente se le puede criticar el hecho de no tener un mariscal franquicia, a menos que consideres a Taylor uno. El problema con el tope salarial no le permitió sumar jugadores importantes este año. La salida de Mario Williams liberó espacio para contratar a dos jugadores importantes en su línea ofensiva, Cordy Glenn y Richie Incognito. No perdieron jugadores tan importantes, Williams viene a la baja a mi gusto, pero hay uno que los puede hacer pagar. Chris Hogan se fue a los Patriots donde Belichik tiene historia de convertir jugadores que nadie quiere en estrellas.

En el puesto de mariscal, Tyrod Taylor llega en su segundo año en Buffalo con la opción de convertirse en el mariscal franquicia que ha faltado por años en esta ciudad. El año pasado tuvo una temporada bastante decente y definitivamente mucho mejor a lo esperado. Superó las 3.000 yardas con 20 TD y 6 Int, pese a perderse un par de partidos. Si cuentas que en un solo partido tuvo la mitad de esas intercepciones, tienes a un mariscal que no entrega mucho la pelota al contrario. Eso normalmente se puede trasladar en más partidos ganados. Además, su atleticismo le entrega una buena opción por tierra al equipo. Esta es una cualidad importante en las ofensivas de Greg Roman.

Taylor demostró gran habilidad para generar jugadas grandes y buena capacidad de liderazgo. Todavía queda la duda si es capaz de echarse el equipo al hombro en circunstancias adversas y su capacidad para leer defensivas o hacer cambios en la línea. Su estilo de jugar también lo expone a una mayor cantidad de lesiones. Practicando esta semana, entró volando a la zona de anotación con salto mortal incluido. Salvo él, nadie más celebró la jugada. Tiene que demostrar mayor inteligencia en todo momento.

Finalmente, mientras terminaba la nota, le dieron la extensión de contrato a Taylor. ¿Fue una buena idea firmarlo a largo plazo? Depende del precio y de la evaluación que tengas del jugador. Si crees que tu mariscal es el futuro y lo puedes firmar a un precio razonable, ¿por qué no? Lo bueno es que, en general, el juego pasa por el ataque terrestre y no se le debería exigir demasiado. Eso le quita mucha presión a un jugador que aprovecha sus oportunidades junto a los espacios que abre el juego de finta y pase. Al ver los detalles del contrato, creo que es bueno para ambas partes. Si Taylor juega bien, van a pagar mucho menos que si le hubieran extendido el contrato el próximo año. Y si juega mal, pueden cortarlo o negociar un nuevo contrato. Y si Ryan o el GM Whaley están fuera el próximo año, la nueva directiva con el entrenador pueden tomar la decisión tranquilos.

El verdadero motor de las ofensivas de Greg Roman es el juego terrestre. Cuenta con uno de los corredores más versátiles y con gran capacidad para cortar en Lesean McCoy. El año pasado tuvo una temporada decepcionante, pero las lesiones lo siguieron toda la temporada. Cuando está sano, es uno de los mejores en la liga. También le acomoda el tipo de ataque que utiliza Roman, por lo que debería ser una campaña de rebote para Shady. Además, puede convertir pases rápidos en ganancias largas. Firmaron hace poco a Reggie Bush para ayudar con la profundidad del puesto. Ya van varios años desde las mejores temporadas de Bush, por lo que espero que no haya sido contratado para un rol importante. Karlos Williams, después de una buena temporada de novato como complemento de McCoy, llegó con problemas de exceso de peso y fue suspendido 4 partidos para iniciar la temporada. Al final está Mike Gillislee, quien también tuvo algunos buenos partidos cuando le tocó jugar. Se puede decir que si McCoy vuelve a tener problemas con lesiones este podría ser uno de los puntos débiles del equipo.

La parte positiva es que la línea ofensiva vuelve intacta del año pasado y fue una de las mejores el año pasado. La parte más fuerte está en el lado izquierdo con los jugadores recontratados Cordy Glenn y Richie Incognito. Lamentablemente, el primero ya se lesionó con un esguince en la parte alta del tobillo. Lo más probable es que se pierda toda la pretemporada. Un profesional como Glenn no debería necesitar tanto el tiempo de juego por su experiencia, pero en una posición donde se necesita tanto el apoyo del tobillo existe el riesgo de que se alargue en parte de la temporada la lesión o no parta al 100%. Incognito es un jugador que se fue con polémica, por ser generoso, de Miami y terminó con una segunda oportunidad que ha aprovechado al máximo. Me alegro cuando jugadores de este tipo se reivindican. Wood también fue de los mejores centros el año anterior, por lo que está una buena parte de la línea muy consolidada. La parte derecha de la línea es mucho más débil e incluso se podría decir que es mala. Tampoco había espacio en el tope salarial para mejorarla. Será un punto a explotar contra este equipo.

En el cuerpo de receptores también se puede ver un problema. Sammy Watkins llega como un receptor más consolidado en su tercer año, pero viene de una lesión que le impidió practicar hasta hace poco cuando fue sacado de la lista PUP. Se rompió el tobillo en mayo y requiere tiempo para volver a entrar en ritmo. Si no cuentan con él en toda su capacidad, este equipo se verá tremendamente afectado. Después viene Robert Woods, quien nunca ha superado las 700 yardas en una temporada. Leonard Hankerson es un jugador que ha pasado de un equipo a otro y lesión tras lesión. Charles Clay llegó de Miami con un contrato de 38 millones de dólares, pero decepcionó el año pasado. No es un mal jugador, pero no está dentro de la elite de la liga y definitivamente creo que no vale su contrato.

Viendo la defensiva, hay mucho talento que podría explotar si se ajustan al esquema de Rex Ryan o viceversa, pero también hay temas de profundidad en los puestos preocupantes por varias razones. En la línea, Marcell Dareus afirma el medio. Es uno de los buenos tackles defensivos de la liga y se ganó hace no mucho un contrato sobre los 100 millones de dólares. No es tan vistoso como Aaron Donald, Fletcher Cox u otros, pero es alguien que te gusta tener en tu lado al jugar. Tiene buena capacidad de llevarse dos marcas y tapar el juego terrestre. Kyle Williams ya tiene 33 años y viene de una temporada de 6 partidos con solo una captura. El año anterior, menos de 6 capturas. Para peor, recién viene recuperándose de una lesión que lo marginó más de la mitad de la temporada. Aun cuando vuelva en forma, hay un tema de edad para tomar en cuenta. Necesitarán ayuda de Adolphus Washington para generar presión, pero es solo un novato de tercera ronda. No hay muchos jugadores productivos que entren en la rotación.

Los apoyadores están sufriendo de una manera significativa. Acaban de perder a Reggie Ragland por toda la temporada con un problema de la rodilla y Shaq Lawson estará afuera la primera mitad de la temporada al parecer. En el caso del segundo, hubo advertencias previas al draft de una posibilidad inminente de operación del jugador. Los Bills hicieron caso omiso diciendo que no era necesario y a los pocos días notificaron que el jugador sería operado finalmente. Punto menos para Whaley, quien no tendrá disponible a sus dos primeros picks la mayoría de este año. Tuvieron que contratar a dos jugadores para compensar las lesiones. Brandon Spikes ni siquiera jugó el año pasado. Manny Lawson es un jugador que contratas para dar profundidad en el puesto, no para ser protagonista. Jerry Hughes firmó el 2015 un nuevo contrato después de algunas temporadas con 10 capturas. El problema es que bajó a la mitad (5) el año anterior. Suele pasar que algunos jugadores bajan su nivel una vez que consiguen su contrato. Puede rebotar este año, pero no es un Justin Houston o JJ Watt.

La secundaria debe ser la parte más fuerte del equipo, a mi gusto. Ronald Darby y Stephon Gilmore deben de ser la mejor dupla joven de esquineros en la liga y a nivel general también. Este último entra a jugar en su último año con contrato de novato. Tiene mucho que ganar con una temporada destacada, ya sean los Bills o en la agencia libre quienes paguen. No descarto que de extender a Taylor pueda tener efecto en su extensión. Darby, para más de alguno, debería haber sido el novato del año en vez de Marcus Peters. Ahora tendrá más experiencia y conocimiento de las rutas que corren los receptores profesionales. Ambos fueron de los esquineros con más pases en su dirección y, salvo un par de partidos, cumplieron su rol sobre lo esperado. Aaron Williams y Corey Graham llenan la lista como profundos titulares. El primero es un gran tackleador y bueno en cobertura, el año pasado se perdió casi toda la temporada por una lesión. Corey Graham es un jugador con nivel decente. Ambos se deberían beneficiar de la habilidad en cobertura de los esquineros.

Al ver el equipo de los Bills, pienso que tienen los jugadores para una temporada ganadora. El problema es que las lesiones los han perseguido y falta un mes para la semana 1. Todos los años hay un equipo que parece maldito por las lesiones, ¿serán los Bills este año? Los problemas con el tope salarial y los jugadores elegidos en el draft no dieron espacio a mejorar la ofensiva. Sus dos mejores jugadores en ese lado vienen de lesiones y sin mucha profundidad detrás de ellos. Un inicio lento o una lesión recurrente puede frenar a la ofensiva de manera importante. Tengo dudas de la capacidad para presionar al mariscal contrario de este equipo también. Ese es un tema que Rex Ryan puede solucionar, ¿pero veremos al entrenador serio o al payaso? Será un gran factor este año para levantar a una franquicia que lleva muchos años sin ir a playoffs.

Miami Dolphins

            Otro equipo que tiene entrenador nuevo, en este caso uno que, pese a su juventud, estaba en los nombres más buscados desde hace un par de años. Adam Gase logró sacar un buen rendimiento a Jay Cutler y los Dolphins se convencieron finalmente a contratarlo. Estuvo llamando jugadas para la temporada record de Peyton Manning, pero creo que otros equipos esperaban a ver si los méritos eran atribuibles al sistema o gracias a él. Después del fracaso de la era Philbin y el mandato interino de Campbell, esta franquicia necesitaba nuevos aires y Gase tendrá la oportunidad de tomar un buen equipo que no ha podido dar el salto. De hecho, no consiguen una temporada ganadora desde el año 2008. Tendrá la obligación de ganar más partidos en el corto plazo. Hay que ver como maneja un equipo profesional y a jugadores complicados, pero

Fuera de la contratación del entrenador, se tomaron apuestas muy riesgosas. Básicamente dejaron irse a jugadores consolidados o entrando en su mejor época para traer a otros que llevan años sin una buena temporada. ¿Tiene lógica? Depende. Hay que ver cómo les va a todos los involucrados, pero en principio no parece tener mayor sentido. El mercado también le dobló la mano a Miami y quedó fuera del rango. Recordemos que tienen que mantener los contratos de Tannenhil y Suh, los cuales tienen un peso importante en el tope salarial. No se podían dar el lujo de un tercero y mantener un equipo competitivo.

La movida que más me llamó la atención fue el intercambio con los Eagles por Maxwell y Alonso además de bajar unos lugares en el draft. Recibieron dos jugadores que el equipo no quería, uno con un contrato muy caro para lo que aporta y más encima retrocedieron en el draft. Irónicamente, esa movida fue clave para que Philadelphia pudiera canjear con los Browns y tomar a Carson Wentz. Entiendo que quieras reemplazar a Brent Grimes, pero no hubiera pensado en Maxwell. De pasada le hicieron un gran favor a los Eagles al deshacerse de dos jugadores que todo el mundo sabía que no querían al ser un error del régimen anterior de Chip Kelly.

Independiente de los jugadores que llegaron, no será fácil reemplazar a los que llegaron. Una de las movidas que más pueden pagar dividendos fue la contratación de Arian Foster. Es un jugador que siempre está lesionado, pero cuando logra mantenerse sano es de los mejores de la liga sin duda. El año pasado no logró estar en forma y al parecer llega recuperado de sus lesiones.

Quizás el área que quedó más descubierta para este año es la presión al pasador donde perdieron dos activos importantes en Olivier Vernon y Derrick Shelby. Tendrán que reemplazar más de 10 capturas entre los dos, además del liderazgo y la atención que tomaban de las ofensivas contrarias.

Este será un año clave para el mariscal Ryan Tannenhill. El año pasado tuvo una extensión de contrato que lo aseguraba hasta el 2020 por 96 millones de dólares. Después de su mejor temporada el 2014, se pensó que finalmente habían encontrado a su mariscal franquicia y le tenían que pagar como tal. El problema es que en su mejor año tuvo 27 TD solamente. No ha sido beneficiado por una rotación de coordinadores ofensivos, pero el jugador también se debe hacer cargo del poco progreso que ha tenido. El 2015 tuvo números similares al 2014, pero cualquier persona que vio jugar a Tannenhill sabe que son pocas las conclusiones positivas que se pueden sacar.

El año pasado su ofensiva superó los 20 solamente en tres partidos. Oportunidades no le faltaron, ya que promedió 36 pases por partido. Siempre se criticó que no utilizaran más a Lamar Miller y el mariscal del equipo no ayudó a cambiar la percepción de esa situación en particular. Incluso, previo a un partido, salió un reporte de que Tannenhill insultó a los jugadores de la escuadra de práctica después de interceptarlo en unas jugadas. Ante eso, Philbin decidió decirle a los jugadores que bajaran un poco la intensidad para no afectar la confianza del mariscal. Obviamente no funcionó su estrategia. En los años que lleva en Miami, no han podido ver a un jugador que se eche el equipo al hombro o que responda en circunstancias adversas.

La presión es mayor este año. La gran razón para traer a Adam Gase es ayudar a que el jugador de los 96 millones de el salto para así poder justificar su inversión. Gase tiene fama de desarrollar a mariscales de gran manera y será una gran prueba. Si Tannenhill no cumple, tengo dudas de cuanto lo aguantará la directiva. Su número contra el tope es muy duro todavía para soltarlo, pero en un par de años más se podrían salir. Además, siempre existe la posibilidad de asumir tu pérdida o cambiarlo a otro equipo. Antes de explorar esas opciones, veamos cómo le va en su primer año con Gase. No se ha visto bien en las prácticas, lo que no es un buen indicador por ahora.

La posición de corredor es una con gran potencial, pero también una que puede traer preocupaciones en el año. Después de dejar ir a Lamar Miller a Houston, se quedaron con Jay Ajayi y no mucho más como corredores. Hay algunos que piensan que promete como titular, pero la verdad es que no hay suficiente evidencia de juego para decirlo. Como si fuera poco, ha tenido muchos problemas esta pretemporada con lesiones y no ha logrado practicar con consistencia.

Dado lo anterior, decidieron contratar a Arian Foster después de su salida de Houston. Se ha perdido 23 partidos en las últimas 3 temporadas. La falta de disponibilidad en el tiempo llevó a su desvinculación del equipo que lo recluto como agente libre novato. A diferencia de Ajayi, los números de Foster, cuando está sano, son contundentes. Cuando eso ocurre debe ser de los mejores de la liga, pero no es algo que ha pasado mucho últimamente. Tiene gran capacidad para encontrar espacios, eludir defensores y una buena velocidad. Otro problema es que viene saliendo de una lesión del talón de Aquiles y es una de las que más cuesta recuperarse en el fútbol americano, especialmente la velocidad. Puede pasar que ambos jugadores formen una buena dupla y Foster vuelva al 100%, pero también que ambos alternen lesiones y los corredores sean el mayor punto débil del equipo.

En la línea ofensiva, el año pasado no tuvieron una buena temporada. Branden Albert es pagado como uno de los mejores tackles izquierdos, pero no está demostrando jugar como tal. Los Dolphins se llevaron una gran sorpresa cuando Laremy Tunsil llegó hasta su puesto cuando la mayoría de los mock drafts lo tenían en el top 5. Un video que salió en el momento del draft donde salía consumiendo drogas lo hizo bajar hasta que Miami lo tomó. Espero que sus problemas de madurez no se trasladen al profesional. De todas maneras, son muchos los tackles tomados en los últimos años que han tenido problemas con la transición a la NFL. No ha jugado lo suficientemente bien en práctica para mover a Albert todavía. Mike Pouncey, al igual que su hermano, es un muy buen centro y solo contribuye a la línea su continuidad. El lado derecho es muy débil con Billy Turner peleando el puesto de guardia con el fracaso de primera ronda Jermon Bushrod. Ja’Wuan James sigue sin afirmarse como tackle del lado derecho. Lo peor quizás es que no hay mucha profundidad en el puesto.

En los receptores, Jarvis Landry llega firme como el principal receptor después de una buena temporada como jugador de segundo año. Pese a tener pocos TD, casi llegó a las 1.200 yardas por aire. Pese a no contar con gran velocidad, lo compensa con buena ejecución en las rutas y buenos movimientos para dejar atrás a los defensivos. Si Tannenhill explota con la ofensiva de Gase, este podría ser un jugador a seguir este año. Devante Parker llegó reclutado en primera ronda para el draft del año pasado para darle otra dimensión a la ofensiva. Se perdió casi toda la temporada por lesiones y volvió casi al final cuando estaba todo perdido. Aun con el poco tiempo logró cerrar la temporada de buena forma. Será uno de los factores claves en el desarrollo de su mariscal. Kenny Stills es una muy buena opción como tercer receptor aportando con una buena velocidad. Jordan Cameron llegó para reemplazar a Charles Clay, pero no tuvo un buen año tampoco en Miami. No superó las 400 yardas pese a jugar toda la temporada. Todos tienen que mejorar para ayudar a Tannenhill o averiguar si es un verdadero mariscal franquicia.

A la defensiva, duele la partida de Olivier Vernon y Derrick Shelby. El primero estaba entrando a sus mejores años, aun cuando pasó desapercibido por años jugando al lado de Cameron Wake, Suh, entre otros. Tengo mis dudas si valía lo que pagaron los Giants, pero aun así creo que era mejor retenerlo. Shelby era un jugador de rol que aportaba mucho en sus oportunidades limitadas. Ndamokung Suh afirma el medio de la cancha como uno de los mejores pagados de la liga. El tema con este jugador es que no es consistente. Cuando se dedica a jugar fútbol americano, es capaz de dominar como pocos la línea de golpeo. Otros días solamente llega a pararse en su lugar. Y tampoco es que sea un jugador con una persona fácil, para nada. Hay que ver como lo maneja Gase, especialmente en momentos de adversidad. Cameron Wake ha sido un muy buen caza mariscales mientras ha estado en Miami, pero vuelve de una lesión complicada a una edad avanzada. Llegó Mario Williams a reemplazar la producción de los jugadores que se fueron. El lado negativo es que viene de una temporada con polémica con su entrenador y solamente con 5 capturas. Quizás el hecho de jugar contra su antiguo equipo lo motive a elevar su nivel.

La parte de los apoyadores se ve relativamente débil. Kiko Alonso llega después de dos años para el olvido. Después de su gran temporada de novato, se rompió el ligamento y se perdió todo el 2014. El 2015 fue traspasado a Philadelphia a cambio de Lesean McCoy, pero nunca estuvo recuperado de su lesión completamente y no tuvo un buen año. No son todos los jugadores que rebotan inmediatamente después de una lesión de esa categoría, por lo que puede ser un buen aporte. Koa Misi es un jugador intrigante que lo cambiaron al lado externo y cumple un rol aportando, pero no es dominante. No hay mucha profundidad en este puesto tampoco para dar mayor competencia.

La secundaria también sufrió cambios importantes. El esquinero principal Brent Grimes fue cambiado por Byron Maxwell. El primero venía bajando su nivel y tiene más de 30 años, por lo que no le queda mucha vida útil como esquinero y puede ser que en el futuro pase como profundo. Maxwell el año pasado fue quemado una y otra vez el año pasado con los Eagles. Creo que no hubo receptor principal que no abusara de él. Y hablamos de un jugador que le dieron un contrato millonario por cubrir al contrario. No sé si es una muy buena señal que tu mejor esquinero haya sido desechado después de solo un año. Además, es distinto jugar junto a Sherman, Thomas y Chancellor que otros jugadores menos estelares. Abdul – Quddus fue una de las buenas contrataciones de la temporada baja. Fue uno de los mejores profundos en la segunda mitad de la temporada y llega a cubrir un puesto con mucha necesidad.

Parece que el destino de este equipo irá de la mano de Ryan Tannenhill junto al desarrollo de sus jóvenes receptores. Veo a la defensiva con problemas, en principio, para presionar al mariscal contrario a menos que Mario Williams vuelva a su nivel anterior. Además de eso, los veo más débiles que otros años. Es riesgoso haber confiado en jugadores que llevan 2-3 años de su mejor temporada y haber dejado a unos que entran en su mejor época, pero si ganan nadie los criticará.

New England Patriots

Otra temporada baja donde los Patriots tuvieron más noticias fuera de la cancha que adentro. La suspensión de Tom Brady fue ratificada y no jugará los primeros cuatro partidos. Independiente de si es justo o no, esta es una de las franquicias más estables y quizás la mejor preparada para enfrentar esta situación. Bill Belichik es de los mejores entrenadores de la historia y preparará un plan para disfrazar la ausencia del mariscal titular de los Patriots. El lado positivo es que juegan 3 partidos de locales seguidos, algo muy raro en un calendario de cualquier equipo. Si salen 2-2 en esos cuatro partidos, Brady podrá seguir el resto de la temporada tratando de cerrar la ventaja de localía en playoffs.

No es que hubo pocos movimientos en la agencia libre de todos modos. Belichik mandó a Chandler Jones a los Cardinals a cambio de Jonathan Cooper y un pick de segunda ronda. Para muchos fue una sorpresa, pero siempre digo “In Bill we trust”. Dándole una segunda vuelta en el momento, me imagino que no quería darle un contrato millonario como los que reciben los caza mariscales en el resto de la liga. Además, tienen que tratar de mantener a Hightower, Jamie Collins y Malcolm Butler en los próximos años. Creo que los tres anteriores son más importantes que Jones.

No se puede olvidar el episodio para el partido con los Chiefs en playoffs donde fue a una clínica por haber consumido drogas. Ese es el tipo de cosas que a Belichik no le gustan ni le interesa tenerlas en su equipo. Tampoco es un jugador que mostrara gran consistencia en semanas seguidas. Si finalmente ibas a dejar ir a Jones, ¿por qué no recibir una compensación mientras puedas? El tiempo dirá finalmente quien tuvo la razón, pero de una forma u otra buscarán la forma de compensar la pérdida.

Dado todo lo anterior, una de las grandes movidas para este equipo no vino en movimiento de los jugadores. Hablo del regreso de Dante Scarnecchia como entrenador de línea ofensiva de los Patriots. Es una persona con un tremendo conocimiento de la posición, el ambiente de la franquicia y los jugadores actuales. El año pasado fue duro ver como golpearon una y otra vez en la final de la conferencia a Brady. Belichik logró convencer a Scarnecchia de salir de su retiro y volver para tratar de afirmar una línea que tiene muchos jugadores jóvenes.

La agencia libre fue una clásica para Belichik. Esperó que todos pagaran caro o más a los primeros jugadores y se movió entre la segunda o tercera ola de agentes libres. La contratación más importante fue la de Martellus Bennett en un canje antes del draft, pero Chris Hogan podría ser un gran aporte este año. Chris Long renunció a mucha plata solo para jugar en los Patriots. Jonathan Cooper y Shea McLellin serán los próximos proyectos de Belichik de tomar a un jugador desechado y que terminen produciendo en grande.

En la posición de mariscal, Jimmy Garoppolo entra los primeros 4 partidos hasta que llegue Brady de su suspensión. Le tocan partidos duros, pero varios son ganables. El más complicado, en SNF, es de visita contra los Cardinals. Lo bueno es que los locales no contarán con su mejor jugador defensivo en Tyrann Mathieu. Después tienen tres partidos en el Gillete Stadium contra los Dolphins, Texans y Bills. En el caso de Houston, puede ser que no cuenten con J.J. Watt a esa altura. Para Garoppolo será una audición para el próximo año. Si juega lo suficientemente bien, podrá tener un equipo nuevo necesitado de mariscal. Algo por lo que New England debería ser compensado generosamente. Tampoco creo, salvo que la desventaja sea muy grande, que el plan ofensivo pase por el mariscal reserva, pero con Belichik nunca se sabe.

No hay mucha evidencia de lo que ha hecho en su limitada experiencia. Como casi todos los mariscales nuevos, tiene dudas al momento de buscar receptores. Ese momento de duda es el que tiene para buscar al receptor en vez del esquinero contrario. Vale la pena mencionar que Garoppolo tiene más movilidad que Brady, por lo que me pregunto si Josh McDaniels armará la ofensiva en torno a sus habilidades, aunque sea por cuatro partidos.  Ayer jugó su primer partido de pretemporada y fue entrando de a poco en ritmo pese a no contar con varios titulares. Espero que en un par de partidos más ya esté en ritmo para el partido con Arizona. Tenía pensado hablar de Brady, pero que más se puede decir de alguien que es uno de los mejores mariscales de la historia. Solamente encuentro que su suspensión es tremendamente injusta y no concuerda con castigos que se dan a otros jugadores. Espero sacar una nota con mayores detalles de Deflategate en su momento.

En la posición de corredor se ve quizás la posición de mayor debilidad del equipo. Lo bueno es que Brady puede ganar si tener uno dominante. De todas maneras, Belichik siempre se las arregla para sacar rendimiento de corredores que no conoce o no rendían como Green Ellis, Ridley, Woodhead, Blount, Kevin Faulk y así podría seguir con algunos. Uno de ellos es Dion Lewis, quien fue uno de los corredores más sorprendentes el año pasado hasta que quedó fuera por una lesión de rodilla. Es el clásico modelo de corredor híbrido a lo Faulk que brilla en el esquema de los Patriots. Todavía no sale de la lista PUP y está la duda si partirá la temporada o estará elegible para jugar desde la semana 7. Quizás es mejor considerando que es un jugador vital para la ofensiva y podría ser positivo darle un mayor tiempo de recuperación. Legarrette Blount viene bajando, pero da una buena opción como corredor de fuerza en su rol limitado. James White también es un buen corredor cumpliendo el mismo papel que Dion Lewis. El año pasado falló atrapando unos pases claves en la final de la AFC que podría haber cambiado el partido. Ha ido mejorando cada año y es una buena póliza de seguro. Donald Brown también llegó este año para darle mayor profundidad a la rotación y debería aportar si le toca jugar.

Lo bueno para Garoppolo, y después Brady, es que tendrán más profundidad y calidad en sus receptores y alas cerrada. Quizás solamente es superado por los del año 2007 donde estaban Randy Moss y Wes Welker. Julian Edelman está recuperándose todavía de su operación del tobillo y el otro día dio un gran susto al equipo al salir de la práctica. Afortunadamente fue solo eso, un susto. Es uno de los jugadores ofensivos más importantes del equipo y un líder indiscutido. Su velocidad y técnicas en rutas cruzadas o en general son excelentes. Pese a ser chico, logra dejar atrás a algunos de los mejores esquineros utilizando su técnica. Su ética de trabajo es incuestionable y está trabajando constantemente. Danny Amendola, un clon de Edelman, aceptó quedarse en New England por menos plata. No está al nivel del anterior, pero como tercer receptor es capaz de aportar de manera importante al equipo. Se ve beneficiado de los grandes jugadores que se llevan atención adicional. El jugador que puede ser importante este año es Chris Hogan. Los Patriots se lo llevaron desde los Bills como agente libre restringido. Tiene características similares a Edelman y Amendola físicamente. Lo que le llamó más la atención a Belichik es su inteligencia, algo que busca en todos sus jugadores. En parte por orientación ofensiva y juego de mariscal muchas veces deficiente no pudo destacar en Buffalo. Sin embargo, es el jugador rápido, disciplinado y de buenas manos que suele destacar en la ofensiva de Brady. Malcolm Mitchell fue reclutado este año y cumplió ayer en su primer partido de pretemporada, mostrando buenas manos y capacidad para romper tackles. Se lesionó y tuvo que salir, pero debería estar desde la semana 1 contra los Cardinals.

Cuento aparte es el de las alas cerradas. El intercambio por Martellus Bennett debería cambiar la ofensiva a muchas formaciones con doble ala cerrada, como cuando estaba Hernandez y Gronk en el equipo del 2011. Rob Gronkowski sigue siendo el jugador más valioso después de Tom Brady en el equipo. Si lo marcas con un esquinero, lo domina en fuerza y tamaño. ¿Con un profundo y un apoyador? Se lo va a llevar en velocidad seguramente. Una de las cosas increíbles de Gronk que pese a tener fama de payaso, merecidamente, es un competidor feroz. A diferencia de otras alas cerradas que son buenos receptores, él es un bloqueador formidable. Recuerdo el año pasado cuando Mario Williams trató de empujarlo, en la semana 2, en la línea de golpeo y no lo movió un centímetro. Es el arma fundamental de Brady y es una de las grandes claves para volver al Super Bowl. Su capacidad para llevarse doble o triple marca ayuda a que otros jugadores queden abiertos. Bennett siempre ha sido considerado uno de los mejores en su posición. En Dallas tuvo poco protagonismo en sus primeros años detrás de Jason Witten, pero se desarrolló como un buen bloqueador. En Chicago finalmente se destapó con algunas buenas campañas aun con la irregularidad de Jay Cutler.  Nunca ha tenido un mariscal de la talla de Brady además de ser protagonista de la ofensiva. Si logra estar abierto y es la mejor opción, lo encontrarán sin duda. Quizás el único problema es su alto perfil que choca con la cultura “The Patriot Way”. Hay que ver si se adapta a este ambiente o si termina siendo una distracción.

La línea ofensiva fue la más criticada el año pasado. Hay que darle el crédito a una defensiva de miedo de los Broncos que se encargaron de maltratar a Brady. Las lesiones afectaron un poco, pero todos los equipos tienen algunas. No es excusa por ningún lado. Nate Solder y Sebastian Vollmer afirman los extremos de la línea. El primero sufrió una lesión que lo dejó fuera toda la temporada y dejó vulnerable el lado izquierdo, algo que no pudieron solucionar como hubieran querido el resto del año. Uno de los problemas del nivel bajo fue la alta rotación en las formaciones. Los Patriots fueron el equipo que más rotaron formaciones por lejos y eso terminó pesando mucho. La única forma de afirmar la liga es con muchas práctica y repeticiones de jugadas. Esta unidad requiere una gran coordinación y estar rotando constantemente no contribuyó a lo anterior. Vollmer también será beneficiado por cambiarse al lado derecho, su posición natural. Bryan Stork sigue mejorando como centro desde que fue reclutado y es un jugador muy sólido en una posición importante. Shaq Mason aparece como fijo en el lado izquierdo de guardia. Tuvo un buen año como novato y se ha ganado la titularidad justamente. Tre Jackson, Jonathan Cooper y Josh Kline se pelearán el puesto restante. El año 2014 cuando ganaron el Super Bowl este equipo tuvo un muy buen juego de su línea. También se benefician de que Brady es uno de los jugadores que más rápido se desprende de la pelota y de su lectura de defensivas. La mayor ayuda, como comentaba inicialmente, viene con el regreso de Scarneccia.

En la línea defensiva, se vienen ajustes con la salida de Chandler Jones. Afortunadamente estaban algo preparados desde el año pasado con la contratación de Jabaal Sheard. Tuvo 8 capturas pese a jugar de forma limitada con la presencia de Jones. Ahora estará tiempo completo y sus números deberían subir al menos a dos dígitos. Vale la pena destacar que el año pasado New England fue el segundo equipo con más capturas. El que tuvo más justamente fue Jones con 12.5, por lo que tendrán que reemplazar su producción. No se hace con un jugador solamente obviamente.  Lo bueno es que el equipo tiene varias formas de presionar con distintos jugadores. Llegó Chris Long de los Rams y puede aportar con algunas capturas. Si saca entre 5 y 6 creo que será bueno. Rob Ninkovich también está como ala cerrada/apoyador híbrido que le gusta a Belichik. Se lesionó hace poco y no estará hasta Octubre en las canchas al menos. Este es un jugador que representa el éxito del sistema de Belichik. Físicamente no tiene características destacadas, pero es un jugador inteligente, esforzado y que produce de distintas formas constantemente. En el medio, Malcolm Brown seguirá mejorando después de una muy buena temporada de novato. El jugador de Texas es todo lo que los Patriots esperaban cuando lo reclutaron en la primera ronda. Además, entra en el perfil de linieros que encajan en el sistema con una buena combinación de fuerza y agilidad. Terrance Knighton fue una buena contratación, al ser un jugador muy potente contra el juego terrestre. Al dejar ir a Hicks y soltar a Easley recientemente, queda poca profundidad en el puesto.

En la parte de los apoyadores también hay poca profundidad, pero están algunos de los mejores jugadores. Dont’a Hightower es un excelente jugador por el centro. Sus tackles son durísimos y es de temer contra el juego terrestre. Su mejor jugada fue en el Super Bowl cuando tackleo a Lynch con un hombro (el otro se lo había lesionado en el partido) evitando una anotación segura. Una jugada después el partido se había acabado con la intercepción de Butler. A medida que ha ganado experiencia, su habilidad en cobertura ha ido mejorando significativamente. Es un líder y encaja perfectamente en la cultura de los Patriots. Jamie Collins es uno de los apoyadores más versátiles de la liga. Le permite a Matt Patricia y Belichik intentar distintas formaciones y jugadas. Es muy rápido y bueno presionando al mariscal contrario. Su habilidad en cobertura también es destacada, más allá de la final de la AFC donde no jugó al 100%. También es bueno cerrando la esquina en el juego por tierra. Shea McLellin dará, entre otros jugadores, mayor profundidad a un puesto que no tiene la cantidad de jugadores de calidad que uno esperaría.

En la secundaria, hay muchos menos motivos de preocupación. Malcolm Butler ya demostró que no fue solamente una jugada y tuvo una gran temporada 2015. Siempre aparece en los momentos grandes y tuvo buen rendimiento aun jugando con algunos de los mejores receptores de la liga. Lo increíble es que es solo su segundo año como titular, por lo que tendrá la oportunidad de seguir mejorando. Logan Ryan es otro de los jugadores subvalorados de la defensiva y ofrece garantías como segundo esquinero. Cyrus Jones fue el primer jugador reclutado este año. Una de las críticas a Belichik como GM es que nunca recluta buenos esquineros en las rondas altas, lo mismo con los receptores. Veremos si esta vez acertó. En los profundos, Patrick Chung ya ha demostrado que New England es su casa después de un paso fallido por Philadelphia. Ya está afirmado como titular siendo un jugador sólido, pero no espectacular. Devin McCourty es un gran profundo, con gran lectura de jugadas e infalible para tacklear. También es uno de los líderes del equipo. Tiene una gran capacidad para cerrar espacios y fue una de las razones en el buen juego de la secundaria el año pasado.

El año pasado parecía casi seguro que los Patriots irían al Super Bowl, hasta que los lesiones los frenaron un poco y terminaron perdiendo la localía. Al final de la temporada parecía que todos se lesionaban, ¿se repetirá la mala suerte este año? Creo que hoy en día es clave ser el primero de la conferencia para llegar a la final. Este año sumaron piezas muy importantes, pero hay dos preguntas importantes. ¿Cuánto pesará la ausencia de Tom Brady y como reemplazarán la salida de Chandler Jones? Creo que la primera es mucho más relevante, por cierto. Mientras estén Tom Brady y Bill Belichik, los Patriots serán candidatos al título y eso no ha cambiado para este año.

New York Jets

Lo mejor de la temporada baja de los Jets es que se acabó la teleserie del equipo con Ryan Fitzpatrick. Después de meses de drama donde quedaba claro que Fitzpatrick podía jugar con los Jets o no jugar, finalmente llegaron a un acuerdo antes de que partiera la pretemporada. Luego de varios años malos bajo Rex Ryan, llegó Todd Bowles como entrenador en jefe. Sorprendió y bastante, por cierto. Estuvieron a poco de clasificar a playoffs hasta que su mariscal recordó por qué le dicen Pickpatrick en la semana 17 para peor.

La peor noticia que recibieron fue cuando publicaron el calendario de la temporada regular. Tengo que decir que alguien no le tiene buena a este equipo. Las primeras fechas son las siguientes: Bengals, @Bills, @Chiefs, Seahawks, @Steelers, @Cardinals y Ravens. Para poner en contexto, de los 7 equipos anteriormente nombrados 5 fueron a playoffs el año anterior, uno lo barrió ganándole los dos partidos el 2015 y otro recuperará todas sus figuras que se lesionaron el año pasado. En pocas palabras, el calendario es brutal. De hecho, es difícil ver que salgan con un record ganador de esos partidos. Veo mucho más probable que pase lo contrario e incluso podrían partir la temporada 2-5 y además quedándole dos partidos contra los Patriots. Podría pasar que lleguen a la mitad con la temporada casi perdida y manejar un grupo que tiene expectativas altas en esas circunstancias es muy difícil.

Dos grandes pérdidas fueron la salida de Chris Ivory y Damon Harrison. El corredor el año pasado tuvo una temporada donde logró dar el salto emulando, para algunos, a Beast Mode abusando de defensivos una y otra vez. La parte negativa fue que se quedó sin bencina para el cierre de la temporada. Tuvo una carga muy pesada la primera parte y no logró aguantar el castigo. Harrison se fue a los Giants por buena plata. Fue una de las grandes razones para que los Jets fueran uno de los mejores equipos defendiendo por tierra. Snacks es un ancla por el medio y nadie logra moverlo. Otra que pesará fue el retiro de D’Brickashaw Ferguson. Después de 10 años jugando solamente para este equipo y jugando todos los partidos mientras estuvo, solo queda aplaudir al hombre. Fue un tackle de calidad y, pese a no ser de los más nombrados, mantuvo su nivel en cada año. El rumor fue que cuando le pidieron que aceptara una reducción de sueldo para traer a Fitzpatrick decidió retirarse.

Para reemplazar a los anteriores, llegaron Matt Forte y Khiry Robinson como corredores. El primero ha sido uno de los jugadores más consistentes en su posición por años. Steve McLendon llega como tackle defensivo, el cual es un jugador muy productivo aunque no al nivel de Harrison. Ryan Clady llegó desde Denver como tackle izquierdo. Es un buen jugador, pero, como Arian Foster, no logra mantenerse sano. En dos de sus últimas tres temporadas ha quedado fuera casi todo el año. Tampoco ha mostrado el nivel que lo llevó a ser uno de los mejores tackles izquierdos de la liga.

La gente que sigue a los Jets debe estar feliz de que volvió Fitzpatrick y no tener que ver a Geno Smith un año completa. Viene de la mejor temporada estadística en la historia de los Jets, quienes no cuentan con una historia grande de pasadores salvo Joe Namath (lo que hace que sea un logro importante). La decisión de renovar su contrato era la única opción que existía. Los mejores años de Fitzpatrick fueron con Chan Gailey como entrenador en Buffalo, el mismo que es coordinador ofensivo de los Jets. También cuenta con una de las mejores duplas de receptores en Marshall y Decker. Estuvieron a punto de clasificara playoffs el año pasado y lo necesitan para tratar de entrar este año.

No es la primera vez que se gana una extensión de contrato. En los Bills, el año 2011, le dieron un nuevo contrato por 59 millones de dólares (harta plata en esa época) que no terminó por mal rendimiento. En las temporadas que siguió superó apenas el número de anotaciones sobre las intercepciones. Después de eso estuvo en dos equipos con números poco espectaculares. Llegó a un ambiente ideal en los Jets con los resultados que ya conocemos. ¿Qué quiero decir con esto? Fitzpatrick no es un mariscal de calidad y nunca ha mostrado consistente entre años y, antes del 2015, entre partidos. No sería el primer equipo que decepciona. Hay razones por la cual está en su sexto equipo como mariscal. Una de ellas es su tendencia a entregarle la pelota al contrario, por lo que fue nombrado Pickpatrick. Recordó ese nombre en su peor momento en la semana 17 contra los Bills, en el partido que los terminó dejando fuera.

Este año hay más expectativas y el calendario mucho más duro. Tampoco cuenta con su tackle izquierdo que lo cuidó todo el año. También existe la posibilidad de que nos recuerde por qué ha cambiado tantas veces de equipo. Hay razones por la cual no fue contratado por ningún equipo en la agencia libre. Dicho lo anterior, si quiere repetir lo hecho el 2015 está en el mejor lugar posible para hacerlo.

En la posición de corredor, Matt Forte llegó desde los Bears como uno de los jugadores más consistentes en su posición. Promedio 1.500 yardas totales (por tierra y aire) en sus 8 años en Chicago. Nunca fue de los líderes por tierra, pero lo reemplazaba con versatilidad de juego. Tampoco nunca superó los 20 intentos por partido, promediando 17 en su carrera. La parte mala es que ya tiene 30, edad en que la mayoría de los corredores empiezan a decaer y tengo dudas si es capaz de aguantar la carga como corredor principal. De hecho, con la salida de Ivory los Jets no tienen una alternativa tradicional potente por tierra. Khiry Robinson debería ayudar a compartir la carga, pero no tiene mayor experiencia. Por otro lado, tampoco la tenía Ivory cuando llegó el año pasado a los Jets. Sin embargo, estaba más adelante en la curva que Robinson. Bilial Powell fue un jugador importante cerrando el año recibiendo desde el backfield. Hicieron bien en retenerlo y podrá combinarse con Forte para distraer a las defensivas.

En los receptores, siguen Brandon Marshall y Eric Decker como los principales receptores. El año pasado, después de experimentar el 2014 como receptor #1, Decker pasó al #2 y volvió a producir como en Denver. Entre los dos se combinaron para más de 2.500 yardas y 26 TD, lo que es impresionante. De hecho, Fitzpatrick tuvo 31 TD totales por aire, lo que habla de la dependencia de estos jugadores para el éxito de la ofensiva. Ambos son grandes, fuertes y con buenas manos. Para la mayoría de los esquineros es muy difícil cubrir a un Marshall muy potente en la zona roja. No se puede decir mucho más, cualquier mariscal daría lo que sea por tener esta dupla. Salvo ellos, no hay muchas alternativas. En los alas cerradas, bien gracias. Ayudan a explicar por qué concentró Fitzpatrick sus anotaciones en dos jugadores.

Veo un posible problema en esta temporada. Marshall tiene historial de problemas fuera de la cancha y ha sido diagnosticado con “borderline personality”. Este es su cuarto equipo y en todos ha tenido problemas eventualmente con su equipo, especialmente con sus mariscales. Si Fitzpatrick no cumple a lo esperado, ¿volverán los episodios de Marshall? Cada vez que se pasa a otro equipo tiene un período de “luna de miel” hasta que vuelve a lo anterior. De hecho, en Chicago fue canjeado un año después de una extensión de contrato porque su permanencia era insostenible. Hace poco, en una práctica, tuvo una pelea con el esquinero estrella Darrelle Revis. No es raro que pase en esta época del año, no será la primera ni la última. Lo llamativo fue que después habló con los periodistas dando su versión de la pelea. Eso nadie lo hace. Todo se arregla de forma interna. Marshall ha peleado por años con sus problemas y espero que los haya superado, pero en la adversidad suele pasar lo peor.

La línea ofensiva parece peor que el año pasado. Tal como comenté anteriormente, la salida de Ferguson y la llegada de Ryan Clady parece un retroceso. Es un jugador que no está como en sus mejores años y que además se lesiona mucho. Obviamente los Jets deben haber estado conformes con su estado físico y esperan que retome su nivel, pero por ahora soy escéptico. James Carpenter viene de quizás su mejor temporada como guardia y empieza a justificar su selección de primera ronda, será el mejor hombre de esta unidad definitivamente. Nick Mangold ha sido uno de los mejores centros de los últimos años y junto con Ferguson afirmaron por mucho tiempo al equipo. Sin embargo, viene de su peor año probablemente como profesional y ya tiene 32 años. Breno Giacomini también viene de una mala temporada y el lado derecho, junto al guardia, tiene pinta de que puede ser un colador.

La línea defensiva, pese a la perdida de Damon Harrison, sigue cargada de talento. Después de etiquetarlo como jugador franquicia y suspenso sobre su futuro, los Jets extendieron el contrato a Muhammad Wilkerson. Es uno de los buenos presionadores de la liga y jugadores de ese tipo no vienen frecuentemente. Lo normal es pagarles y no dejar que se vayan a otro equipo. Viene de ver su temporada finalizada por una fractura en la pierna y hay que ver como se reintegra este año. Ha superado las 10 capturas en dos de las últimas tres temporadas y es un jugador muy sólido contra la carrera. La contratación de Steve McLendon ayudará a compensar en parte el puesto de tackle defensivo, pero no está al nivel de Harrison. Tuvo buenas temporadas en Pittsburgh y es un buen jugador de rotación, pero ahora tendrá mayor responsabilidad en los Jets. El año pasado en el draft corrieron en el puesto 6 al ver que estaba disponible Leonard Williams. Este año tendrá mayor protagonismo y un año más de experiencia. Es un jugador con mucha agilidad para su tamaño y se espera que de un salto importante para esta temporada. No me sorprendería que llegue a las 10 capturas. Sheldon Richardson es un buen jugador para complementar en la rotación. No parece que tendrán problemas presionando, pero el juego contra la carrera puede sufrir un poco más para este año.

La parte de los apoyadores es una posición gran incertidumbre en equipo. David Harris fue un buen tackleador el año pasado, pero ya tiene 32 años y eventualmente empezará a pesar la edad. Darron Lee fue la selección de primera ronda del equipo y se espera que sea titular desde el principio. Tiene grandes cualidades físicas y una gran velocidad, con capacidad de hacer jugadas de lado a lado. Si cumple sus expectativas, podría elevar a un grupo poco vistoso en uno muy sólido. Lorenzo Mauldin se alínea en la parte externa, pero no es un jugador dominante ni del promedio. Solo aporta en la rotación. Sumaron a Bruce Carter para ayudar en la profundidad en el puesto. La edad de Harris y el rendimiento de Lee serán las grandes claves para este grupo.

La secundaria aparece muy sólida. Darrelle Revis sigue entre la elite de la liga como esquinero. Conoce todos los movimientos, todas las rutas y técnicas posibles de los receptores. Es un jugador que los mariscales suelen evitar. Sin embargo, ya tiene 31 y hay algunos que creen que se está acabando su vida útil como esquinero y pronto pasaría a profundo. ¿Se acuerdan de la pelea que tuvo con Marshall? Su origen vino de una recriminación del receptor por cuando fue quemado el año pasado por Deandre Hopkins de los Texans. Tuvo unos problemas de muñeca el 2015 que lo complicaban para tapar a los receptores en la línea de golpeo. Sigo pensando que es de los mejores en su posición y lo confirmará este año. Buster Skrine llegó el año pasado después de una buena temporada en Cleveland. Pese a jugar al lado de Revis, no tuvo muy buenos números. Tuvo solo una intercepción y menos pases defendidos que el 2014. Incluso, en muchos partidos no fue titular. Calvin Pryor mejoró en su segundo año, pero todavía no justifica su selección de primera ronda. Ya en su tercer año se espera que tome un rol más protagónico. Marcus Gilchrist jugó sobre lo esperado el año pasado, incluso mejor que Pryor, y esperarán mayor consistencia este año una posición que podría ser muy solida esta temporada.

Se viene un complicado año para los Jets, donde tendrán expectativas muy altas y a la vez un calendario durísimo. Puede pasar que lleguen a la mitad de la temporada con un escenario cuesta arriba. Todd Bowles es un gran entrenador y tiene un gran núcleo de talento. Veo difícil que repitan el record del año pasado, pero tampoco los veo hundiéndose. Me preocupa un posible problema con Marshall, pero si juega como el 2015 este equipo debería andar muy bien.

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